La seguridad de los datos, y sobre todo una filtración o robo de datos, no es solo importante por las multas. Los daños en la reputación de una empresa que lo sufre pueden ser incalculables.
En 2021, el gigante de las telecomunicaciones T-Mobile experimentó una importante violación de datos en la que los piratas informáticos obtuvieron acceso a más de 48 millones de datos de clientes actuales, anteriores y potenciales.
Los datos confidenciales robados en este ataque incluían números de seguridad social, nombres y apellidos, fechas de nacimiento e información de identificación de los clientes.
T-Mobile perdió alrededor de 5.3 mil millones de dólares en valor de acciones. Al explicar esta caída en el precio de las acciones, los analistas financieros mencionaron que la empresa podría enfrentar problemas legales, pero señalaron un problema aún mayor: el daño a la reputación.
Los daños causados por una divulgación de información no intencional podrían ser más que los costes de recuperación y los honorarios legales. La mala seguridad de los datos puede romper la confianza que una empresa ha creado con sus clientes, inversores y empleados.
El daño a la reputación podría perjudicar a las empresas mucho después de que resuelvan una fuga de datos. Para comprender el valor de la seguridad de la información adecuada, los líderes primero deben comprender cómo las violaciones de datos pueden causar daños financieros inmediatos y daños a la reputación a largo plazo para las empresas.
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La seguridad de los datos es lo más importante para los consumidores
A medida que más empresas recopilan información confidencial, los consumidores se preocupan cada vez más por la protección de datos y la privacidad.
Esta creciente preocupación por la seguridad de los datos probablemente sea el resultado de los crecientes ataques y robos de información que las empresas están sufriendo en los últimos tiempos.
Para muchas empresas, lo que está en juego en la protección integral de datos nunca ha sido tan grande.
Cómo las filtraciones de datos pueden dañar la reputación corporativa
La reputación define cómo los consumidores, empleados y otras partes interesadas perciben una empresa, lo que puede tener importantes implicaciones comerciales.
Los consumidores quieren hacer negocios con organizaciones que perciben como honestas, éticas y alineadas con sus valores, especialmente cuando se trata de protección de datos.
Cuando los datos se ven comprometidos, los consumidores pueden sentir que las empresas no operan de manera ética ni se preocupan por su información confidencial.
Es posible que este daño en la reputación corporativa no tenga impactos financieros inmediatos como lo harían las multas o los costes de recuperación, pero puede afectar el resultado final de una empresa.
Un informe de tendencias de la experiencia del cliente de 2020 concluyó que aproximadamente la mitad de los consumidores cambiarán de marca después de una mala experiencia con la privacidad de los datos.
Para generar confianza y relaciones duraderas con los clientes, las empresas deben priorizar la seguridad de los datos y tener muy en cuenta la protección de los mismos.
Consejos para la gestión de la reputación y el papel de la seguridad de los datos
La protección de datos debe desempeñar un papel en toda estrategia de gestión de la reputación de marca.
- Crear una cultura de seguridad: la protección de datos efectiva requiere la participación de todos los empleados de la empresa. Para montar la mejor defensa posible contra los ladrones de información, las organizaciones deben crear una cultura de seguridad mediante el establecimiento de políticas que preparen a los empleados para ayudar a prevenir las filtraciones de datos. Una cultura orientada a la seguridad debe incluir capacitaciones periódicas sobre protección de datos de los empleados y políticas en el lugar de trabajo, como una política de destrucción total.
- Comprender los riesgos: las empresas podrían tener dificultades para desarrollar un programa eficaz de protección de datos si no saben dónde, cómo y durante cuánto tiempo almacenan información confidencial. Los profesionales de la seguridad de la información pueden ayudar a los dirigentes a comprender sus procedimientos actuales de administración de datos e identificar posibles vulnerabilidades de seguridad.
- Invertir en soluciones y personal: una empresa podría tener dificultades para prevenir las amenazas a la seguridad de la información sin invertir en tecnología y personal de protección de datos. Estas inversiones pueden parecer costosas, pero en última instancia podrían ahorrar a las empresas millones en daños financieros y de reputación.
- Tener un plan de respuesta: la respuesta de una empresa a una fuga de datos también puede afectar su reputación a largo plazo. Las organizaciones que cuentan con planes de respuesta a filtraciones de datos pueden trabajar rápidamente para minimizar los daños a los clientes y comunicar claramente la situación a todas las partes interesadas. Aquellos que no tienen un plan de respuesta corren el riesgo de empeorar el alcance de un ataque de datos y alienar a los clientes.
- Proteger los datos físicos: si bien la mayoría de la cobertura de los medios sobre violaciones de datos se centra en los datos almacenados en ordenadores e Internet, los datos físicos, como documentos confidenciales y discos duros, también conllevan un riesgo significativo para la seguridad de los datos. La destrucción confidencial de información es una de las prácticas más efectivas para prevenir el robo de datos físicos. Contratar una empresa de destrucción de documentos que ofrezca las mejores prácticas de destrucción de documentos, incluidos contenedores seguros, un completo sistema de trazabilidad y un certificado de destrucción después de cada destrucción, como DCD.
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